Inicio Análisis político Enrique Vidales Ripoll La desesperación es mala consejera

La desesperación es mala consejera

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Si hoy la historia hubiera sido otra, una respuesta sería que la ciudadanía toma más en serio la alternancia como una forma de control de la democracia, lo que es positivo, para evitar el retorno a la hegemonía de un partido político.
Sin embargo, la campaña de la confrontación directa y provocativa, que empezó desde Germán Martínez, presidente del PAN nacional, y que en Yucatán, concretó disciplinadamente Carolina Cárdenas, ha restado simpatías en una gran parte del electorado que esperaba mucha más altura en la propuesta que un simple “si votas por nosotros, ayudarás al presidente”. Porque ha demostrado en los hechos mucha incongruencia.
A continuación algunos ejemplos:
Hoy se cuestiona a Ivonne Ortega Pacheco, por Carolina Cárdenas, dónde está el tren bala y las viviendas que se prometió en el 2007. Pero preguntó ¿en dónde están los miles de empleos que prometió Felipe Calderón Hinojosa?
Ahh… pero resulta muy sencillo para los panistas, a su presidente Germán Martínez, escudarse en la crisis económica mundial como el obstáculo que ha impedido la concreción de esa propuesta.
¿No se le podría aplicar la misma argumentación para el Gobierno del Estado?
Ayer en el Diario de Yucatán publicaron un desplegado de página completa cuestionando y exigiendo más atención sobre la influenza a la Gobernadora del Estado.
Pero en contraparte, tenemos el caso de la legisladora local, líder de la bancada blanquiazul, Patricia Gamboa Wong que acudió, contra indicaciones médicas y las emitidas por la Secretaría de Salud Pública Federal y del mismo presidente Felipe Calderón Hinojosa, a sus labores en el Congreso del Estado sin importarle contagiar a sus compañeros legisladores ni a los ciudadanos que acuden a ese recinto para alguna solicitud específica.
¿Es congruente su comportamiento a lo que nos han pedido que los ciudadanos respetamos como normas mínimas de higiene y contacto social?
Pero en lugar de pedir las disculpas correspondientes aprovechó para lanzar arengas contra las autoridades sanitarias cuando los resultados confirmatorios dependen del trabajo de los laboratorios nacionales en manos de la presidencia panista.
No hay estrategia ni operación política. Son bandazos desesperados por la realidad que cada día se confirma más: que es resulta muy difícil remontar lo que las encuestas dan como aproximaciones de las
Como lo decía mi abuelito… la desesperación es mala consejera