A nadie tomó por sorpresa la victoria de Delfina Gómez. En el mismo PRI se sabía el destino que correría el tricolor. Los priístas nunca se enfrentaron a Delifna, ellos siempre tuvieron al Presidente, Andrés Manuel López Obraddor como adversario.
Hay quienes celebran el triunfo de Coahuila, ¿en serio creen que ganaron porque tienen el mayoritario respaldo de los ciudadanos?. Ganaron Coahuila porque en Morena no escogieron bien al candidato, que nunca proyectó la imagen del Presidente AMLO.
Guadiana espantó el voto ganador.
Ahora bien, queda claro que la coalición Morena – PVEM – PT gana elecciones, siempre y cuando vayan unidos y escojan a un candidato o candidata, que proyecte bien la imagen del Presidente Obrador.
Estas dos condiciones no se cumplieron y Guadiana fue el perdedor.
En Yucatán deben cuidar el cumplir estas condiciones.
Si la coalición no se consuma, los partidos irán solos con sus candidatos. Al PVEM no le alcanza, al PT, tampoco. Morena podría elevar su votación pero no ganaría la elección.
Para replicar el triunfo en el estado de México, la coalición debe ser un hecho. Para ello, es necesario que ya se trabaje en un proyecto de selección de los candidatos. En la que compitan todos los que aspiren con argumentos reales.
En el 2024, Yucatán es un reto para Morena, un gran reto, porque el PAN está muy sólido, muy fuerte, con dirección y con propuesta-
Renán Barrera está perfilado. El PAN buscará ganar la gubernatura con él a la cabeza. Si no hay unidad en la coalición, Renán será el próximo gobernador del estado.
En el PRI se preparan para administrar la derrota y alcanzar puestos importantes para el próximo sexenio. Política y electoralmente están muertos.
Es urgente una fotografía de Alpha Tavera con Harry Rodríguez y Paquito Rosas, para enviar un mensaje de esperanza.
Si no es así, el PAN, de la mano de su Jefe Político, ganará.
