Corrupción galopante en México
La corrupción es el principal motivo de falta de crecimiento, y el subdesarrollo de una nación. Hoy en día ocupamos el lugar número 89 en todo el mundo. ¿De qué sirve presumir de una mejoría en la recuperación económica?, ¿de qué sirve tener un presidente que dizque es del empleo?, ¿de qué sirve tener un presidente que dizque combate la delincuencia?… no sirve de nada.
En ella el sistema encuentra las oportunidades para saciar su sed de saqueo del erario.
La corrupción está arraigada por la necesidad de encontrar atajos. No es la falta de transparencia lo la que fomenta sino la falta de valores.
La transparencia es un control político, una excusa para golpear políticamente al enemigo, y es desde luego, el motivo perfecto para sacar raja política.
La corrupción mueve partidos, los sume en la mediocridad y hace que se pierda la credibilidad. Al PAN, la corrupción galopante de sus cuadros dirigentes y de su gobierno estatal, le ocasionaron la pérdida de la confianza ciudadana.
Nunca un gobierno fue tan burdamente corrupto como el gobierno de Vicente Fox y de Patricio Patrón Laviada. Éste último incluso, fue el promotor del mecanismo de tráfico de tierras bajo el esquema del sigilo político, se hicieron de miles de hectáreas al amparo de la oscuridad del mismo. Compraron tierras engañando a campesinos, usando prestanombres y vendiendo a 1000% sobre el valor de las tierras.
Metrópolisur fue el gran fiasco a la sociedad, el pretexto de la construcción de un nuevo aeropuerto fue lo más burdo y al final, los yucatecos dijeron no y expulsaron a los panistas del poder.
En el año 2003, el 9 de diciembre la agrupación Sin Corrupción es Mejor participó en la asamblea internacional para el combate a la corrupción organizada por la ONU, y ante 180 delegados del mundo expusimos la realidad de nuestro país y de nuestro Estado.
Hicimos un repaso de la lacerante situación que vivía nuestra nación a manos de una pareja presidencial inventada por los panistas que enriqueció con el escudo de la democracia y la transparencia pública. Nada más fals que eso, pues México se sumió en la pobreza y la miseria.
A 6 años de distancia, nos sentimos orgullosos de haber alzado la voz ante el mundo y de haber propuesto como alternativa de solución una Ley para el Combate a la Corrupción que tipificara los delitos como el tráfico de influencias y el enriquecimiento ilícito dentro del orden penal equiparable al delito de robo en primer grado.
Una Ley, que además fuera el soporte de la creación y funcionamiento del Instituto para el Combate a la Corrupción, para que su labor fuera más correctiva y vigilante del manejo del erario y la conducta pública.
Se ha logrado una parte, pero no todo. El gobierno de Ivonne Ortega Pacheco ha demostrado compromiso con la sociedad, pero la pasividad y la parsimoniedad de los responsables hacen que dicho Instituto nos queden a deber.
México no es libre totalmente, mientras la corrupción nos golpee con la fuerza de la impunidad. Mientras la corrupción siga siendo una realidad en el país, la democracia jamás podrá consolidarse para bien de los yucatecos.
Coincidir en Actitud, Acción y Pensamiento, agrupación cívica
Sin Corrupción es Mejor, AC
