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El año que viene se celebrarán 10 elecciones estatales en todo el país. Las condiciones en que enfrenta el país dicha competencia es de apremio político, porque en ese aspecto está cifrado el desarrollo de la vida nacional.

Las negociaciones en la cámara de diputados para configurar una Ley de Egresos está basada en las necesidades de los gobernadores de las entidades, y en ellas, se juega el futuro electoral de los partidos politicos de los que emanan.

Para nadie es un secreto que el PRI buscará el apoyo total de la secretaría de hacienda para obtener recursos de la federación que le permita consolidar los gobiernos que tiene en toda la nación. Por ello, los gobernadores presentan sus proyectos de inversión, proyectos viables que impulsen la economía de sus entidades.

En el caso de Yucatán, la gobernadora Ivonne Ortega Pacheco presentó 225 proyectos de inversión para la entidad; destacando la ampliación del malecón internacional de Puerto Progresos que recibe al año miles de visitantes del extranjero que arriban a ese punto turístico en cruceros.

Uno de los ambiciosos proyectos de inversión es el de la plataforma logística que estará ubicada en el oriente del Estado, específicamente en la Ciudad de Valladolid; centro que servirá para concentrar los esfuerzos económicos de la región y desde allí comercializar servicios y productos a la zona turística de Quintana Roo.

Otro proyecto de primer mundo lo constituye la construcción del museo Maya, una propuesta que generará respuesta a la demanda del sector mundial que ama la cultura de nuestra región. El turismo es una de las fortalezas de nuestra economía.

En opinión del presidente nacional del PAN “El presupuesto que se apruebe mañana (hoy domingo) cubrirá las necesidades del país en 2010; no va a haber jaloneos y confío en que llegaremos a tiempo”.

México necesita del acuerdo nacional, y éste no permite contratiempos. Así como Yucatán, Campeche, Quintana Roo, Veracruz, Tabasco necesitan de los recursos que se hacen indispensables para continuar con el crecimiento y desarrollo integral que realizan.

Aunque existen diferencias de posturas partidistas, es clave que las fracciones parlamentarias de los diversos partidos políticos privilegien el acuerdo, no es posible, y así se ratifica, pedirles que se aparten de sus intereses, pero se les exige que hagan un esfuerzo por el país.

Son tiempos de garantizarle a los mexicanos un rumbo cierto. El presidente Felipe Calderón no ha podido – aunque lo ha intentado – ser el líder de los mexicanos, pero eso no puede frenar el avance de la nación. Es importante, trascendente que se fortalezcan los liderazgos en todo el país, porque un país sin líderes está condenado a vivir con los ojos vendados.

Las elecciones venideras son fundamentales para la construcción del país que se desea de cara al futuro próximo por venir; y desde luego, constituyen el nuevo pacto entre el presidente y los líderes del PRI. Para nadie es un secreto.