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Simpatías y rechazos de Rolando Zapata hacia los aspirantes a sucederlo

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Lic. Rolando Zapata Bello, Gobernador de Yucatán.

 

Conoce las simpatías y rechazos de Rolando Zapata hacia los aspirantes a sucederlo

El Gobernador del estado es por ley suprema dentro del PRI, el que puede vetar o puede impulsar la candidatura de su sucesor. Entender un poco el fondo de esta facultad revolucionaria, abstracta, incongruente pero cierta, es necesaria para acercarnos un poco a la gran decisión que habrá de tomar el Jefe Político del PRI.

En uno a uno, entenderemos más sobre Rolando Zapata Bello.

Rolando y Víctor Caballero. Son amigos de toda la vida, se conocen. La simpatía es natural, han transitado por un largo tiempo, han sido pacientes, perseverantes y leales. Rolando está convencido de que su amigo debe sucederlo, sin embargo, hay quienes se oponen fuertemente a esta posibilidad. Hubo errores que no se solventaron a tiempo y que hoy representan obstáculos. El rechazo es hacia la imposición, aunque Rolando en sí, confía plenamente en Caballero. Sabe que al entregar el gobierno en sus manos, él podrá disfrutar un poco de lo mucho alcanzado, tanto en lo público como en lo privado.

Rolando y Jorge Carlos Ramírez Marín. Fueron socios políticos en algún tiempo. Se conocen y se respetan. Son de la misma generación. Se entienden porque hablan el mismo lenguaje. Sin embargo, Rolando no confía plenamente en él porque sabe que JC es un político inquieto y habilidoso. Su rechazo está básicamente en el grado de confianza que no alcanza la relación con el diputado federal.

Rolando Zapata y Pablo Gamboa. Generacionalmente son incompatibles. Son muchos los años de diferencia y Pablo habla otro lenguaje político. Rolando no se entiende con él. En realidad el gobeernador es una persona que piensa mucho sus jugadas, a diferencia de Pablo que tiene otra personalidad. Rolando sabe que Pablo tiene amplias posibilidades de ganar la elección, pero no está convencido de que Pablo quiera jugar en equipo con el equipo de Rolando.

Rolando Zapata y Carlos Berlín Montero. El Gobernador respeta mucho a Berlin, porque conoce su trayectoria. Sabe que hablar con Berlin es un diálogo de ida y de vuelta, donde ambos encuentran respuestas precisas. Si Rolando confiara plenamente en Berlin, no me queda la menor duda que el candidato a sucederlo sería él. Pero alrededor de Rolando hay quienes no confían en Berlin, por el simple hecho de que no es de su grupo polítco.

Rolando Zapata y Mauricio Sahui. Son compadres, grandes amigos, socios en la política y están hermanados por un pasado de grandes anécdotas. Rolando sí confía en Mauricio. El problema radica en que existe un bloque al que no les gustó el “madruguete” de los espectaculares con el ya famoso “Sahui Gobernador”. Sahui es un político joven que está en su momento. Las cosas se pusieron difíciles para el Gobernador, si por él fuera, no habría problema con Mauricio como candidato y luego como mandatario.

Rolando Zapata y Roberto Rodríguez Asaf. Rolando le agarró mucho aprecio a Roberto. Le entregó la responsabilidad de hacer que las cosas financieramente funcionaran y funcionaron. Roberto significa la cara más responsable de Rolando Zapata, sin embargo, falta algo que tiene que ver con el feeling político. No se ve el deseo de Rolando por hacer candidato a Roberto. Y Roberto está listo para la encomienda. Tal vez un sector de empresarios frunzan el ceño pero el resto no lo vería mal.

Rolando Zapata y Francisco Torres “Panchito”. En el pasado fueron grandes amigos, socios inclusive. Sin embargo algo sucedió en los últimos años que los separó políticamente. Aunque Rolando a últimas fechas le ha demostrado a Panchito que lo aprecia. Se conocen, saben que la vida los unió en algún momento para hacer cosas grandes. Fueron equipo en el gobierno de Ivonne Ortega y lograron cosas importantes. Ahora viene lo bueno. Rolando creo confiará en Panchito como en los viejos tiempos, aunque no para hacerlo candidato a gobernador.

Rolando Zapata y Felipe Cervera. Son amigos, han hecho alianzas entre ellos en el pasado y en el presente. La confianza es de buen nivel, saben dialogar y en especial, Felipe ha sabido ser leal. Sin embargo, la posibilidad de que sea el sucesor de Rolando asusta a muchos integrantes del equipo del gobernador. Lo ven con desconfianza y eso podría contaminar la relación de Rolando con Felipe. No es cuestión de capacidad, sino de confianza. Como candidato Felipe es sin duda, una garantía de votos.

Rolando Zapata y Liborio Vidal. Son amigos, en realidad lo son. Tienen una lealtad entre ellos que rebasa la media. Se respetan y se conocen. La capacidad de Liborio para desarrollar estrategias ganadoras está probada. Sin embargo, Liborio es un ente que no concilia con el equipo del Gobernador. Sus intereses son diferentes al de ellos y no les garantiza oportunidades en el futuro en caso de que se dieran las cosas con Liborio a la cabeza. Rolando piensa mucho en el futuro, por eso se toma su tiempo para pensar en el presente.

Rolando Zapata y Angélica Araujo. Fueron rivales, fueron amigos, fueron compañeros de gabinete y se llevaron bien. Hasta que vino el tiempo de la candidatura por la presidencia municipal de Mérida, que recayó en ella. Posteriormente se disputaron la candidatura al gobierno, resultando él el ganador. Angélica ha tenido que luchar en contra de la reticencia del equipo de Rolando y es hasta tiempos recientes cuando le han hecho gente. Angélica desea ser la candidata del PRI al gobierno de Yucatán. Pero en el equipo oficial, no comparten ese deseo.

Rolando Zapata y Celia Rivas. La relación es amistosa de toda la vida. La confianza es buena, ella ha demostrado su capacidad y le ha brindado a él, la oportunidad de avanzar en sus objetivos legislativos. No ha habido petición alguna que Celia no haya podido solventar en el Congreso. El gobernador está contento con ella, sin embargo, hay algo que no cuadra. Celia es apreciada por Rolando pero él tiene planes diferentes para ella. Creo que Rolando debería modificar sus planes y hacerla la candidata al Senado.

Rolando Zapata y Lucely Alpizar. El aprecio entre ellos es enorme. Son grandes amigos, leales en todo. Para Rolando, ella es la indicada para ser la Senadora por Yucatán. Le atribuye una capacidad diplomática, sin embargo, a últimas fechas ella ha mostrado una gran debilidad, no le agrada la crítica y condena a quienes le critican. Rolando creo, siente que ella posee grandes talentos para hacer política. La verdad es que ella, debe demostrar con hechos que los posee.

Rolando Zapata y Ernesto Herrera. El Secretario de Fomento Económico se ganó la confianza plena del gobernador. Su talento y sus buenos oficios le granjearon tal lujo. La confianza es tal, que el propio Gobernador le dijo a Ernesto que sondeara la posibilidad de que fuera su sucesor. Y lo demás está a la vista. Ernesto está de moda. Los empresarios hablan de él y preguntan más. Quieren saber qué onda con él. Al tiempo, todo al tiempo. En el equipo de Rolando, Ernesto tiene serios y peligrosos enemigos.